Juan Camilo Álvarez, director de proyectos de la empresa Urbalia Panamá, encargada de la operación del relleno, manifestó que hace más de un año están en espera de los permisos de operación, pero no han sido aprobados.
 
‘Desde mayo del 2014 se tenía planeado poner en funcionamiento el horno incinerador', expresó lue-go de resaltar que desconocen los motivos del porqué se ha demorado la aprobación o negación de los permisos.
 
Añadió que hace ocho meses las autoridades del MINSA les ordenaron realizar algunas correcciones que ya fueron hechas, pero aún así no las aprueban.
 
ARGUMENTOS
 
Ante la queja de directivos de Urbalia Panamá, el titular de Salud, Francisco Javier Terrientes, dijo que luego de que se les hiciera las observaciones, la empresa no ha presentado los informes que prueben que las mejoras fueron hechas.
 
‘En la última inspección tenían pendientes unas adecuaciones que todavía no han notificado que las hayan corregido', expresó.
 
Las fallas detectadas se encontraron en la chimenea del horno que debía ser desviada para expedir los residuos que emanan de esa actividad.
 
Ante esto Álvarez defendió a la empresa asegurando que ‘ya hemos corregido todo y no nos dan el permiso'. Agregó que el horno tiene un sistema de filtración que purifica el humo que sale sin contaminantes al ambiente.
 
Actualmente el incinerador está en una fase de ajustes y mantenimiento en espera de la aprobación para empezar a cremar de 10 a 12 toneladas de desechos diarios, lo que se traduce en 10 kilogramos (22 libras) de desechos hospitalarios por hora.
 
Este proyecto, que tiene un costo de $4 millones, forma parte del contrato que Urbalia heredó de Urbaser Plotosa en julio de 2011.
 
El ministro Terrientes anunció que hoy esperan un informe completo de la situación actual en la que se encuentra este incinerador de residuos hospitalarios.
 
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CAPACIDAD
22 libras de residuos por hora podrán cremarse en el horno una vez empiece operaciones