“Se trata de un proyecto de confinamiento de residuos peligrosos, un tema que tenemos que abordar, atender y acatar la ley”, señaló la bióloga Eglantina Canales Gutiérrez, titular de la Secretaría de Medio Ambiente en el estado.

Los confinamientos, dijo, “tienen una legislación que los ampara y los regula, obviamente, y en este caso hay una petición para uno de esos centros en General Cepeda, que fue sometido a la autoridad ambiental federal, a la que le corresponde dar la autorización en materia de impacto ambiental y ya la dio”.

La funcionaria estatal señaló que ahora lo que sigue es realizar un estudio técnico justificativo, y posteriormente el cambio de uso de suelo del predio que albergará dicho centro de confinamiento.

“El primer elemento que detona un proyecto es cuando se tiene el impacto ambiental, porque todo lo demás es consecuencia de ese permiso; si no hay ese permiso no hay nada y ahorita estamos en ese momento”.

Refirió que el tamaño del proyecto es considerable pues se incluyen laboratorios, áreas de confinamiento y remediación.