La fuga de sustancias químicas, biológicas, radiológicas o nucleares es potencialmente peligrosa por lo que es imprescindible que los bomberos conozcan cómo actuar en estos casos, informó ayer el Consorcio. Aunque se sabe cómo intervenir, en ocasiones la realidad no coincide con la teoría, por lo que estas prácticas y simulacros son claves para garantizar el éxito en este tipo de sucesos, explicó el jefe del área de l'Alacantí y profesor del curso, José Rabasco.

En el simulacro participaron tres vehículos de Bomberos con doce efectivos dotados del equipo de protección reglamentario y un contenedor de riesgo químico, biológico y nuclear. Una vez evacuadas las víctimas y establecido el perímetro de seguridad, se hermetizó el escape y se neutralizó el vertido.