Lo anterior, luego de que inspectores de la dependencia federal realizaran una visita al basurero municipal “a fin de verificar el supuesto acopio irregular de Residuos Peligrosos Bilógicos (sic) Infecciosos (RPBI), provenientes de establecimientos de salud en la localidad”.

Sin embargo, a lo largo del texto no existe un listado de los residuos peligrosos que encontraron, sólo menciona que localizaron “púnicamente la presencia de émbolos de jeringas sin aguja”.

En contraste, NTR Medios de Comunicación constató y documentó que en el lugar habían residuos hospitalarios como gasas con sangre, émbolos de jeringas con líquidos en su interior, vendas ensangrentadas, entre otras cosas.

Además, en el comunicado de prensa se afirma que en el basurero “separan los RPBI de la basura común, por lo que los primeros son cubiertos con tierra para evitar algún tipo de contacto con la ciudadanía”.

La Norma Oficial Mexicana 087, en su artículo 6 respecto al manejo de residuos peligrosos biológico-infecciosos, apartado 6.2.1, establece que los RPBI “no deberán mezclarse con ningún tipo de residuos municipales o peligrosos”.

Además, en el apartado 6.3.2 dice que los RPBI “envasados deberán almacenarse en contenedores metálicos o de plástico con tapa y ser rotulados con el símbolo universal de riesgo biológico, con la leyenda RESIDUOS PELIGROSOS BIOLÓGICO – INFECCIOSOS”.

Situación que, de acuerdo con el boletín y como constató NTR Medios de Comunicación, no ocurre en Fresnillo.

Los inspectores de Profepa, consigna el comunicado, “entrevistaron al encargado del lugar y explicó que los RPBI se depositan al lado izquierdo del relleno sanitario; les pasan maquinaria pesada por encima; y los cubren con tierra a fin de evitar que en ese espacio personal humano se haga (sic) pepena o selección de los desechos vertidos ahí”.

De tal forma que no existe manejo alguno de los RPBI en este relleno sanitario.

El documento enviado por la Profepa agregó que se habló con personal de los hospitales del IMSS y el Regional de Fresnillo para consultar lo que hacían con sus RPBI, y en ambos casos se constató que los nosocomios entregan estos desechos a una empresa de Aguascalientes para su incineración.

Empero, en el boletín no se da a conocer si esta misma información se solicitó a los hospitales privados que, de acuerdo con el encargado de Limpia del ayuntamiento, José Luis Gracia Ramírez, “les veían la cara” por arrojar sus desechos en el basurero municipal.